Que privilegio haber conocido a Felipe, un hombre como dicen en buen chileno “bacan”, cálido y tan sincero, humilde para que sentarse a hablar con un café fuera un panorama suficiente, porque siempre le importo el tiempo de calidad… también con una linda capacidad de ver El Oro en las personas y animarles con ello… como buen coach jeje! Que alegría saberme parte de su grupo de amiguitos, cada risa, cada chiste, cada meme…. No niego que pienso que nos faltaron paseos a la playa y unos cuantos cafés más… pero el Señor es soberano, y hoy estás en el mejor panorama de su vida.
Me quedo con todo lo bueno vivido, me queda una amiga hermosa, La Ani de Felipe, que también es de Jesús, que también es nuestra Ani… a ella todo mi cariño, todo mi amor y compañía.