La tía Rosita fue una mujer luchadora, una mujer increíble.
Siempre recordare los lindos momentos que pude compartir con ella, ver su sonrisa que contagiaba a cualquiera que estuviese cerca de ella. Lamento mucho que se marchara, pero dios sabe porque hace las cosas. Solo pido que dios pueda darles consuelo, que sepan que esta descansando, que siempre estará junto a nosotros, en nuestros corazones y los hermosos recuerdos que dejo.
La recordaremos como la gran madre y abuela que fue.