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Cómo elegir palabras indicadas en un discurso para funeral

Tiempo de lectura: 3 minutos
El fallecimiento de un ser querido es una época difícil en la que es necesario ocuparse de ciertos trámites, tanto legales como ceremoniales. En este sentido, un discurso para funeral es una instancia muy importante para honrar la memoria de esa persona especial, y traer alivio a los corazones de familiares y amigos.  En definitiva, puede ser un discurso inspirador que puede ofrecer el confort que las personas necesitan en momentos de dificultad. Por eso, saber cómo hacer un discurso para un funeral es una gran manera de servir a otros y fomentar la unión, algo esencial para superar las circunstancias. 

¿Cómo hacer un discurso para un funeral? 

Aunque siempre está la opción de citar pasajes religiosos o autores reconocidos, un discurso para funeral escrito por ti es la mejor manera de dar las condolencias y despedirse de un ser querido, ya que será más significativo para todos.  Al principio, puede haber temor por la posibilidad de equivocarse y decir algo que hiera los sentimientos de otras personas, es por eso que existen ciertas consideraciones a tomar en cuenta: 

Elige el tono adecuado

El tono se refiere a la velocidad de la dicción, la acentuación, el volumen, el timbre de la voz, entre otros aspectos. Muchas personas aprecian los discursos en un tono ameno y despreocupado, incluso divertido, porque invita a recordar la personalidad del difunto. Sin embargo, no siempre los discursos de este tipo son bien recibidos.  Hay ocasiones en las que puede ser ofensivo para la familia, por lo que es muy importante determinar sus preferencias. Para más seguridad, puedes preguntar a los involucrados y elegir el tono en base en su opinión. 

Recopila historias

Dependiendo del tono que hayas elegido para tu discurso, puedes incluir anécdotas de la vida del difunto que inspiren o conmuevan a los presentes. Por ejemplo: “Recuerdo cuando…”, y compartir historias sobre cómo esa persona era con sus familiares, amigos cercanos o cómo se relacionaba con la comunidad. 

Reúne información sobre la persona fallecida

Un aspecto importante en los discursos funerarios es que, incuso si el difunto era un amigo cercano, es probable que no tengas todos los detalles de su vida familiar.  Para evitar decir algo inapropiado, es importante hacer primero una investigación de cómo era la relación con sus familiares u otras personas, así como las creencias religiosas de la familia.  A partir de esta información, tendrás una mejor idea de lo que debes evitar. Por ejemplo, frases como: “Es el plan de Dios” o “Está en un lugar mejor” no son las más adecuadas si los familiares no comparten estas creencias. Es necesario pensar en la susceptibilidad de los seres queridos, sobre todo en un momento en el que hay bastante carga emocional. 

Elige las palabras correctas

Así como el tono de voz puede comunicar sentimientos, las palabras también tienen un enorme impacto, porque el cerebro les da significado.  En este sentido, es necesario evitar las ambigüedades y preparar un discurso neutral. Es decir, que debe significar lo mismo para todas las personas. También es conveniente, tomando en cuenta las circunstancias, elegir un lenguaje sensible que no evoque emociones negativas. Por ejemplo, en lugar de “murió” puedes utilizar “falleció”.  Por último, si te quedas sin ideas puedes buscar inspiración en proverbios de condolencias e incluso ocupar uno como epítome de tu discurso. En todo caso, recuerda que no es la extensión sino la calidad del mensaje lo que las personas realmente apreciarán.  Si no sabes cómo hacer un discurso para funeral, la Funeraria Inmemoria cuenta con un gran grupo humano que te entregará apoyo emocional y asesoría para crear un discurso que pueda honrar la memoria del fallecido. 
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